pero se trata de lo mismo. La misma historia, las mismas palabras, las mismas seis letras de la palabra mismas. Todas son las mismas que resuenan como ese eco en los corazones endurecidos por tánta nada todos los días, por tánto budismo.
Tampoco es maniqueo ni troglodita el repetirlo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario