sábado, agosto 11, 2012

Perseidas 2012

A veces creo mucho en mi buena suerte y me fío de ella, me olvido de mi instinto, de mi razón. Me ha ido bien muchas ocasiones al actuar así... Cuando me va mal creo en mi capacidad de reconstruirme y de inspirar a los que me rodean en que podemos seguir y salir adelante. 

Me crié en un entorno sin muchos recursos, austero. No había nada para el dispendio. Así he crecido la mayor parte de mi vida. Ya cerca de la madurez, he hecho concesiones limitadas al despilfarro, sobre todo después del diagnóstico de la enfermedad crónica que acortará mi vida y la calidad de mi salud. No me cuesta ponerme límites en gastos. No temo si eso me ayudará a crecer.

Bienvenidas Perseidas 2012, señal de un cambio en la actitud.

No hay comentarios.: