sábado, agosto 02, 2008

El milagro


Ya ni siquiero creo en el milagro del amor. Sólo se que la acidez de tu saliva ha cauterizado mis heridas y por ello sanan más rápido. Tu calor descongela mis carnes magras y me amoldo a ti para dormir y no soñar. Eres mi pequeño.

Te soñé muchas veces y no eres lo que esperaba. En eso reside el milagro.

1 comentario:

josé luis dijo...

ay güey... ¡...!