No me quiero sentir de esta manera derrotado por imbéciles. Mi orgullo me impide aceptar que puedo perder batallas y no salirme con la mía. Tengo la palabra SMART marcada con fuego en mi mente y perdurará hasta después de que muera. Los gusanos seguirán dibujando esas letras cuando coman mi carne, los huesos de mi cráneo lo tienen sellado hasta que me convierta en polvo.
Si, he perdido en el pasado. A veces mucho. Me he arrastrado en el suelo de rabia. Me han tirado muchas veces pero no ahora que siento que emerjo de decenas de pesadillas médicas y me siento dispuesto a vivir mis últimas noches en paz o haciendo lo que se me antoje.
Me doy flojera.
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